La cadera es una de las partes del cuerpo que más termina dañándose con el paso de los años. Todo por el simple hecho de que, el cartílago (tejido que recubre la articulación) suele tener un desgaste pronunciado con el paso de los años. Lo cual, termina denominándose como coxartrosis de cadera.
La coxartrosis de cadera es una enfermedad que se produce con los años (envejecimiento) con diferentes traumatismos o con cambios hormonales. Algunos especialistas también suelen afirmar que el peso es uno de los factores por los que se produce dicha enfermedad, ya que llega un momento donde la articulación no resiste el peso. Otros factores mínimos (pero importantes) para tener dicha enfermedad es tener trabajos donde se necesite cargar peso o una simple causa genética hereditaria.
Síntomas de la coxartrosis de cadera
Los síntomas más frecuentes al tener coxartrosis de cadera, son los siguientes:
- Dolor: empezará muy leve y poco a poco se irá intensificando hasta llegar a doler en reposo (en principio solo duele un poco al caminar o al realizar actividad física).
- Rigidez: Empezarás a notar una limitación constante en el movimiento. Esto suele suceder cuando la persona está detenida por mucho tiempo e intenta caminar de nuevo.
- Cojera: Debido a que se pierde fuerza en la pierna, la persona tendría tendencia a cojear.
- Deformidad articular: Esto suele suceder cuando ya la coxartrosis de cadera está muy avanzada y se comienza a notar físicamente.
Tipos de coxartrosis de cadera
Hasta el momento, se conocen 5 tipos de coxartrosis de cadera, los cuales son los siguientes:
- Cadera leve: Suele ser la primera que se nota y es porque se empieza a producir un dolor desde los isquiotibiales hasta la rodilla. Algunas veces, el dolor puede que no sea continuo ni intenso. Solo cuando se realice actividades físicas importantes o cuando se levanta de la cama en la mañana. Algunas personas llegan a sentir dolores por un par de meses y al cabo de un tiempo, no vuelven a sentirlo.
- Cadera moderada: Es lo contrario a la anterior, simplemente se basa en un dolor continuo donde las personas pueden llegar a perder un poco de movilidad. El dolor es tan continuo, que muchas veces puede llegar a complicar las horas de sueño.
- Cadera severa: Este tipo de coxartrosis es cuando el paciente ya no puede dejar de sentir dolor y termina por perder la capacidad de realizar tareas cotidianas por sí solo. Lo cual, afecta en la calidad de vida de la persona y de las que lo rodean.
- Cadera primaria: Es cuando una persona mayor a 60 años no encuentra una causa directa para tener artrosis de cadera.
- Cadera secundaria: Contrario a lo anterior, se puede dar en jóvenes y existe una causa directa de la artrosis de cadera. Algunas veces, se puede creer que es por malformaciones anatómicas.
Tratamiento de la coxartrosis de cadera
Después de tener el diagnóstico de coxartrosis de cadera, solo existen dos tratamientos posibles: el casero combinado con rehabilitación y, la cirugía. Básicamente, el tratamiento “casero” o fisioterapéutico se basa en rehabilitación total del paciente. El médico especialista lo remitirá a un nutricionista para que comience a hacer dieta y baje de peso. Lo cual, provoca que no tenga más desgaste en los huesos.
Luego, puede empezar a realizar ejercicio aeróbico (caminar, andar en bicicleta) mientras toma analgésicos para calmar el dolor (paracetamol, ibuprofeno). Al final, se hace una especie de rehabilitación y se evita estar de pie mucho tiempo.
Ahora bien, si el paciente está sufriendo mucho dolor, no puede dormir y ninguna de las terapias/rehabilitaciones anteriores le ha servido; la única solución que queda es la de la cirugía de cadera. Suele considerarse como una de las operaciones más exitosas de la medicina, ya que provee mejor calidad de vida al paciente. Pero, su recuperación es compleja.
Pruebas diagnósticas para determinar el dolor de coxartrosis de cadera
Finalmente, debes saber que la coxartrosis de cadera se puede diagnosticar haciendo una simple radiografía. Pero, si el especialista puede solicitar una TAC o una resonancia magnética en caso de ser necesario para determinar con exactitud el origen del dolor.